Hace unos días compartí este post en el blog de "mis chicos", y quería compartirlo desde aquí
Espero que os guste
Algunos tenemos en la retina, muy reciente, las experiencias vividas en London... Y cuando piensas en ello, se te aparecen los días de trabajo previos. Fue un camino largo, lleno de ilusión, trabajo, esfuerzo, y muchas emociones. Llegó la fecha, y los 8 días fueron intensos, pero pasaron rápido.
Si pudiera, os pasaría un resumen de lo mejor que pudimos vivir y que tengo aún flotando en mi memoria, pero no es posible. Lo único que puedo deciros, es que vale la pena luchar por vivirlo, y poder formar parte de ese capitulo, que acaba formando parte de ti y que influye en tu manera de ver las cosas a partir de entonces... No creo que nadie lo cambie por nada.
El caso es que ahora, acabamos de empezar a caminar de nuevo; los primeros entrenamientos otra vez...; las primeras competiciones otra vez...; las primeras realidades contrastadas con las ilusiones...; muchos empiezan con la bombona de oxígeno a tope, y van perdiendo aire aceleradamente; otros empiezan con poco aire, quieren llenarse con más y luchar hasta el final; otros van llenos a ratos, a ver por donde me lleva el camino y cuanto voy a necesitar gastar.
La dificultad existe en cualquier cosa que hagamos, no hay más que ver como se vive hoy. En realidad, nosotros nos preparamos muy duro, y podemos luchar en cualquier sitio por ser los mejores sobrevivientes. Siempre que tenemos el camino claro, por mucha subida que haya, vamos a seguir hasta llegar arriba y ver después cual es el mejor sitio para seguir pisando más duro.
Los días duros pensaría en...
...que pocas cosas cuestan tanto, pero pocas cosas llenan tanto.
...que lo de "creer es poder", realmente se queda corto. Hay que creer, pero hay que creer como si la vida te fuera en el intento; al menos cada vez que te preparas. Y eso para nosotros, es cada día.
...que no hay sacos rotos, hay que llenarlos tanto que aunque haya un agujero, no pueda escaparse nada.
...y sobre todo...que un sufrimiento con ilusión, puede dartelo todo; pero una ilusión sin sufrimiento te deja en el mismo sitio...
No hay regalos, pero si cada vez que respiras hay un poco de tus sueños, un poco de sacrificio, un poco de ambición y un poco de ilusión, llenas el pulmón de ese aire que te alimenta más que nada, que puede sacarte algo extra en el momento más duro, y que te lleva a sonreir cada día.
Es imposible, para un mediterráneo, separar emoción y sacrificio, necesitamos ser felices en el proceso, y eso te lo da el convencimiento y la determinación en lo que haces, y sobretodo nunca perder de vista ese sueño que persigues.
"Nadie se nos montará encima si no doblamos la espalda". Luther King.
Y como un largo camino, empieza con un paso, (sino que se lo digan a Neil Armstrong), justo estamos en el momento de pisar firme, levantar la barbilla, y demostrarnos que lo que soñamos, lo que queremos y lo que hacemos...es lo mismo.
Jose Antonio Del Castillo
Entrenador CAR-Rfen
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